DOS ASALTOS EN UN DIA.
La situación de los asaltos a mano armada en Vallarta es preocupante, especialmente dado que estos incidentes parecen volverse más comunes. Los dos casos reportados el viernes reflejan un patrón de delincuencia que podría estar afectando la percepción de seguridad en la zona.
El primer asalto en el Kiosko, donde un empleado fue interceptado al realizar un depósito, muestra la vulnerabilidad de los trabajadores que manejan grandes sumas de dinero. A pesar de la rápida respuesta de la policía, la falta de pistas sobre el asaltante resalta la necesidad de mejorar las medidas de seguridad en estos establecimientos.
En el segundo caso, el asalto en la sucursal de Banorte, demuestra que incluso en lugares considerados seguros, los delincuentes pueden actuar con audacia. La cantidad de dinero involucrada, 100 mil pesos, señala que los delincuentes están apuntando a depósitos significativos.
Es fundamental que tanto la comunidad como las autoridades tomen medidas preventivas para evitar que estos incidentes se normalicen. Esto incluye aumentar la vigilancia en las zonas más vulnerables, así como fomentar la educación sobre la seguridad personal al manejar dinero en efectivo. La colaboración entre la policía y los ciudadanos puede ser clave para restaurar la confianza en la seguridad pública.
